Inicio » Fungi » Peziza estrellada, Sarcosphaera coronaria, hongo que no debes comer

Peziza estrellada, Sarcosphaera coronaria, hongo que no debes comer

Peziza estrellada, Sarcosphaera coronaria
Peziza estrellada, Sarcosphaera coronaria
Brewbooks (flickr.com)/CC BY-SA 2.0

Peziza estrellada, Sarcosphaera coronaria, es un hongo de la familia Pezizaceae, que en su conjunto se clasifica en el filo Ascomycota, clase Pezizomycetes y orden Pezizales . Con anterioridad recibía otra denominación científica: Sarcosphaea crassa.

Presenta un tamaño relativamente grande y con peculiar forma estrellada en su parte superior, asemejándose a una flor. Tiene un elevado grado de toxicidad por lo que no es recomendable su consumo de forma cruda, tampoco mediante cocción. También se le conoce con los nombres de cassoleta coronada, calaverita, cassoleta blava y olla venenosa. Es una especie única e inconfundible por su gran tamaño y forma.

Descripción de Sarcosphaera coronaria

Peziza estrellada crece en una forma semiredondeada con el aspecto similar a una papa, de un diámetro aproximadamente de 12 centímetros, pudiendo llegar incluso a 20 centímetros en casos muy excepcionales. Esta figura la mantienen hasta poco antes de alcanzar la madurez, cuando comienza a abrirse gradualmente un orificio que con el tiempo se va ensanchando y llega a adoptar una forma de estrella.

Su piel externa es lisa y suave, de un color muy claro, casi blanco o crema, mientras que en su interior tiende a ser de una coloración más violácea, intensificando su tonalidad con el pasar del tiempo y la madurez de las esporas.

La carne de la peziza estrellada es de un espesor superior a los 5 milímetros, de textura suave y muy frágil. No se poseen datos concretos sobre el sabor y el olor de la carne de esta especie debido a su alto grado de toxicidad.

Hábitat de Sarcosphaera coronaria

Este ejemplar puede habitar todo tipo de bosques, con mayor tendencia a las áreas donde la composición del suelo es rica en humus y taninos debido a la descomposición de materia vegetal, de un pH entre ácido y ligeramente ácido. Se establecen en estas mismas zonas con poblaciones muy estables en cantidades de individuos. Es tolerante a las actividades antrópicas, por lo tanto es frecuente hallarse en los bordes de senderos, campos de producción agrícola, huertas, entre otros.

En función a los requerimientos de sustrato en este espécimen, la presencia del Sarcosphaera coronaria aporta información clave sobre la calidad de los suelos y la riqueza de los mismos.

Desarrollo y ciclo de vida

No se poseen mayores datos con respecto al ciclo de vida de esta especie. Aun así es posible acotar que los individuos de Sarcosphaera coronaria tienen su aparición en la temporada primaveral, en numerosas cantidades de individuos divididos en grupos muy nutridos. Se esparce por el territorio mediante la liberación de esporas incoloras y de forma elíptica.

Comestibilidad ¿Para qué sirve la peziza estrellada?

Es un espécimen muy tóxico, incluso cuando se le aplique un tratamiento de cocción prolongada no se recomienda la ingesta de este hongo. Existen testimonios de personas que aseguran haber comido de la carne de estos pezizaceos previa cocción y no manifestar síntomas de envenenamiento o indigestión, pero de igual forma no debe ser promovida su ingesta.

Confusiones de la peziza estrellada

Dentro de su área de distribución no existen taxones de similar aspecto que puedan confundir su identificación. Lo más similar al peziza estrellada podría ser la Geopora foliacea, sin embargo su pequeño tamaño de no más de 5 centímetros y su coloración parda marcan una notable diferencia entre individuos de ambas especies.

Otros datos interesantes

Como mantuvimos con anterioridad, no existen especies de similar forma y tamaño que se puedan asemejar a Sarcosphaera coronaria. En el primer momento de su aparición, tiene una forma globosa, como una gran papa, pero al llegar a su madurez, comienza a fracturarse en la parte superior hasta que se abre y va tornándose de la forma de un recipiente con bordes dentados como una estrella. De hecho, por su particular forma es que se le asigna el nombre de “estrellada”.


Publicado

en

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *